domingo, 31 de mayo de 2009

Aqui Estaré!


Ensoñando instantes rozando hiedrado a ti en tu firmamento,
elevando toda mi alma rasando tu ría única
con mi latir en ti respirando de tu ser el aliento,
te siento tan dentro de mí que sin ti me muero.

Nuestro amanecer acaricia la brisa como laberintos de tus cabellos,
ambarinas luces brillan en mis alas cobijándote con el calor de una presa,
Cuanto ansío oírte…ya estas aquí! Inundándome con besos centellados
Y ahora los días pasan muy despacio,
deseoso de que el reloj segundero rellene su arena deprisa,
sigo con mis iriscentes ojos ensoñando mutuamente empapados del calor de la esencia.
Nuestras pulsaciones son tan constante que no cede al reposo,
cada día contigo es incalculable lo que vales en mi vida,
cada segundo vale más que la abundante fortuna prohibida
abrumadora riqueza que exprime cada nuestro umbilical latir.
ensueño despierto bajo la brisa de tu lugar
contigo encontré el puente que siempre quise atrancar,

No me importa perder plumaje de mis alas

Cada instante contigo, junto a ti es levitar

Empapado de agua salada de tan calmada esta la mar.
Hiedrado a tu espalda nos unimos con entreveradas manos

Respirando mutuamente nuestro único aliento

Divisando a lo lejos el adiós del Sol

Tatuando nuestros ojos lagrimas de nuestra pasión.

Brisa celosa nos rodea sin llegar a nuestros cuerpos rozar

Abrumada de la fragancia que no puede disipar

Mis labios te susurran bombeando tu corazón hasta sangrar

Entre la sensación única de un acelerado levitar.
Y serán tantos amaneceres y atardeceres

Donde patentará en infinito nuestra senda la esperanza,
Siendo realidad absoluta de mis nocturnas oraciones

Divisamos nuestro 7º cielo anaranjado y sus nubes enmudecidas

Con mi corazón en ti nunca sentirás tus manos vacías,
Y susurro en el lugar donde deseo vivir intensamente

sentir con tus succionantes labios mis besos,
Aquí estoy!

Tan vivo bajo tu inmenso firmamento.

Dulce invocación de tu lugar de ensueño

Acogiendo nuestras almas del otro mundo,
para sentirnos vivos nací,

Aquí estaré!

Mientras las olas de la ría juguetean entre ellas

Entrecierro mis ojos junto a ti

Invadido por el sentir único de un latir

Bailando nuestras almas bajo una esencia sobrenatural.

Mutuamente sernos el descanso

Vivir tan inmortal la profundere intensidad

de umbilicales sueños en la realidad

tras traspasar mi umbral me elevaste en tu paraíso lugar.

Los latidos de nuestros corazones al unísono no cesan de resonar

Entre amaneceres y crepusculares escenas de un bendito lugar

Donde las olas tatúan en el oxidado puente la alianza umbilical

De nuestro sentir absoluto…tan inmortal.