martes, 12 de mayo de 2009

La Pasion Onubense


En la estación de la calle no perdido

Entre intersecciones de caminos

Bañados de crucifijos arrepentidos

Respiro el aroma a incienso rodeando bajo el siseo de los pasos

Expresiones sombrías de caretas penitentes

Un silencio absorbente de resonancia inerte

Siguen los pasos divisando como timbales de guerra entre entes.

Murmullos penetran entre mis diapasones oídos

Alrededor la marabunta da el calor dirigido hacia los presentes

Paisaje deslumbrante del dolor y de la muerte

El largo silencio se hace presente marcando la luz del penitente

Con el cono infinito que dirige el cielo como un incomprendido

Bajo la esencia de una esperanza evaporada y aturdido.

Cruces mostradas, dolores marcados bajos los hombros del sumiso

Para disipar la culpabilidad de los demonios de la mente perseguida

Bajo el silencio donde nada se oye que se respira

Siguen los pasos bajo la ilusión de un sentir de alma perdida.

El eco calló bajo la sumisión de las lagrimas sentidas

Se ven las figuras como avanzan hacia la cripta

Se denota el latir de cada alma y su existir sintiendo la vida.

Una marea de marabunta creyente, nado entre ellos y contigo presente

Veo sus rostros expectantes respirando un aliento burbujeante

Algunos se lo toman en serio y otros como horas festivales.

Y allí estuve yo recordando junto a ti..entre mi memoria

presencié cobijándome bajo tu ser

La total representación del dolor que perdura en toda la historia.