el espejo reflejo de mi sublime ensoñada realidad
ajeno a la marabunta opresiva
me elevo abrumado, esencia que me concedes inmortalidad.
Oh, como siento recorrer mi sangre
exuberante de tan vivo color,
cómo transita por mis venas
a través del latido, tan unísono, implacable de tu corazón.
Siento como a veces,
los primigenios del tiempo nos devuelven a la realidad
oprimente, indigestiva y tan demente,
se disipa bajo tu tono evocador de calurosos susurros,
que tan presenciales adentran en mi ser,
bañan a mi alma de súblime esencia,
tan cálida, tan dulce y salada, a la vez,
levitándome entre la calma invocada de tu presencia
dónde, como fuente de juventud, alcanzo con mis alas
elevarme hacia la gloria umbilical e inmortal magia.
Oh que fuertes son mis raices donde piso
nada se estanca, siempre en mi a tu ser, diviso
adoro tu alma tan ancestral, bajo mis rezos que por ti vivo.
Única eres, en mi tan vivo mundo,
el centro de mi gravedad hacia tu cobijar despiertas de mi inframundo
que sublime es saborear, indagar, descubrir tan tuyo misterio
que flagela con nuestra sangre al primigenio del tiempo.
Avatar de mi alma, entre mis manos velo entre tus sueños
y te susurro en forma de viento:
- Oigo el rugir del dragón de hierro
profundamente diviso tu invocada presencia,
Tan pronta como deseada
ansiedad que difícilmente se controla
hiedrado de abrumante deseo que me encalla hacia tu roca.
Y cuánto ansío el sublime cobijar que nos hiedra
sumergirme con tu mano en mi pecho
la unificación universal del sentir eterno
en nostro albergue dos en uno,
la integridad infinita de nuestro sabor absoluto:
El aliento respirar de nuestro 7º cielo.
Y rezo entre mis adentros:
Única eres, en mi tan vivo mundo,
el centro de mi gravedad hacia tu cobijar
despiertas de mi inframundo
eres el avatar de mi alma,
con mis tatuadas manos velo entre tus sueños...
Eres el centro de mi gravedad,
el espejo reflejo de mi sublime ensoñada realidad.